martes, 24 de mayo de 2016

LA CENICIENTA TROPIEZA DOS VECES



TORONTO RAPTORS 105-99 CLEVELAND CAVALIERS

(Serie 2-2)
Los Cavaliers no aprenden de sus errores. Tras el tercer partido cualquiera podría imaginar que lo que sucedería en el siguiente encuentro sería algo parecido a un equipo con el cuchillo entre los dientes dispuesto a no permitir que Toronto volviese a dominar el partido en las dos canastas, con Lowry (35 puntos en el partido) y DeRozan (32 puntos en el partido) anotando canasta tras canasta con altísimos porcentajes (13 de 22 para 30 puntos entre ambos al descanso), y con Biyombo controlando los rebotes y haciendo desaparecer del partido y de Canadá al mejor reboteador ofensivo de la liga, Tristan Thompson. Pero esto es más entendible si en el equipo de Cleveland son titulares dos jugadores que no aportan nada en defensa y son uno, una bomba de relojería y el otro la hermana buena de Teresa de Calcuta. Porque J.R. Smith y Kevin Love, a los cuales me refiero, han contribuido de manera notable a la derrota de su equipo con su escasa aportación ofensiva (7 de 26 en tiros de campo con un 5 de 18 en tiros de 3 puntos), y su nula defensa. Esto hizo que al descanso los Raptors ganasen por 57-41.
En los dos partidos en el Air Canadá Center el equipo de Toronto ha anotado 117 puntos a la mitad del partido, por 88 de Cleveland (29 puntos de diferencia).  Tristan Thompson ha pasado de los 15 puntos y 19 rebotes a los 2 puntos y 17 rebotes, mientras que Biyombo pasó de los 15 puntos y 9 rebotes en sus partidos en Cleveland a los 12 puntos y ¡¡¡40 REBOTES!!! De Toronto. Creo que esa es otra explicación de lo que ha ocurrido.
En la reanudación se produjo una reacción de los de Ohio para reducir la ventaja de los Raptors hasta los 9 puntos de desventaja (78-69) a base de mantener a su quinteto titular los 12 minutos en cancha. No queda otro remedio si en el banquillo tienes a un champiñón (Shumpert) que sólo sirve para dar descanso a los titulares, ya que aporta menos que la Tomasa en los títeres.
Pero entonces sucedió un hecho que estuvo a punto de cambiar la historia del partido: Kevin Love notó molestias en su rodilla y no jugó en el último cuarto. En su lugar salió Channing Frye, que es un jugador que tiene la precisión de un francotirador desde más allá de la línea de 3 puntos (4 de 8). Y los Cavaliers anotaron sus 11 primeros lanzamientos a canasta en este último cuarto sin fallo, lo que hubiese resultado mortal para los Raptors de no ser que ellos lograsen mantener el ritmo con un 7 de 10, con tan sólo 3 de sus jugadores realizando algún lanzamiento a canasta en estos últimos 12 minutos. Así los Cavs se pusieron por delante en el marcador 89-92 a falta de 6 minutos para el final del partido, pero los Raptors se repusieron y lograron empatar el partido a 96 puntos a 4 minutos y medio para la conclusión. Era posible cualquier cosa…inclusive una prórroga….pero dieron las 12 en el reloj de palacio y lo que era lujo  se convirtió en miseria. Los Cavaliers anotaron 1 de los 10 lanzamientos que realizaron en este tiempo….y el cuento se acabó.
Las perdices se las comieron los Raptors.

No hay comentarios:

Publicar un comentario