El pasado domingo, una vez finalizado el Joventut – Real Madrid, una reportera de Movistar entrevistó a Andrés Nocioni. Una de las preguntas que parece ser obligada hacerle al de Santa Fe es: ¿Estás satisfecho con los pocos minutos que juegas? Esa pregunta está presente en todas las entrevistas que se le hacen al Chapu, o por lo menos las que yo he escuchado o leído, Imagino que la pregunta en cuestión se hace con el ánimo de encontrar en su respuesta un titular o una jugosa declaración que dé pie a algún debate.
Su respuesta fue algo así como: La culpa es un poco mía, después de el verano que he tenido tan ajetreado y con la edad que tengo, necesito tiempo para recuperar y descansar.
Bien, tengo que decir que cuando la temporada pasada el Real Madrid anunció su fichaje me mostré algo escéptico, no porque el Chapu no tenga nivel o clase para jugar en el Real Madrid, sino por su edad. Poco a poco me fue cautivando y sacándome de mi error. Ya sabemos todos como acabó su temporada, espectacular, siendo MVP de la F4.
Acabé entregado a su causa, pero después de escuchar la respuesta a la mencionada pregunta del domingo pasado, solo puedo decir que si le quedaba un resquicio para ganarme ahí lo cerró.
Uno va teniendo una edad en la que ya no cabe apenas lugar para idolatrar a nadie, pero es admirable ver a un jugador que ha sido campeón de casi todo, que ha jugado en los mejores equipos de Europa, que ha estado en tres equipos NBA, que viene de ganar todo lo ganable en su anterior temporada en el Real Madrid, plantarse ante un micrófono y decir a sus 35 años que la culpa es suya por no dosificarse.
Como madridista, pero sobretodo como aficionado al baloncesto, me siento orgulloso que haya deportistas así formando parte de él. Todo un ejemplo que demuestra que la el éxito, la calidad, el corazón, la raza, la veteranía o el espíritu competitivo y ganador no están reñidos con la humildad, la inteligencia o el saber estar.
¡Chapeau, Chapu!
No hay comentarios:
Publicar un comentario